Es húngara de nacimiento y alicantina hasta la médula. El estilo de vida mediterráneo que la enamoró hace 20 años, cuando llegó a Alicante, ahora lo comparte a través de su inmobiliaria, ayudando a clientes húngaros e internacionales a encontrar vivienda en la Costa Blanca. Hoy vamos a conocer un poco más a la directora de Hogar Mediterráneo, Orsi Oletics Herczog.
Orsi Oletics le agradece al destino poder vivir y trabajar en un lugar donde la playa está al alcance de la mano. “Cada día puede ser una vacación”, nos dice sonriendo, enamorada del mar que la rodea.
«Desde pequeña sentía una atracción inexplicable por España, por eso salí a probar suerte después de graduarme», comienza Orsi, quien ahora dirige su propia oficina inmobiliaria en Alicante. Su negocio le permite compartir el estilo de vida español con sus clientes húngaros e internacionales.
El deseo de aventura la llevó de Hungría a la ciudad costera a los 18 años. Y resultó que en Alicante encontró todo lo que buscaba. “Aquí me convertí en una mujer adulta. Pasé de ser una adolescente insegura a una persona decidida”, añade.
DEL FRÍO AL CALOR
En sus primeros años en Alicante, Orsi trabajó en una empresa de corretaje marítimo. Durante ese tiempo absorbió la mentalidad española y quedó fascinada con la luz del sol, que los alicantinos reciben durante más de 300 días al año, frente a los 180 de Hungría.
También le cautivaron la apertura y la amabilidad de los españoles. Afirma que esto es natural incluso en la vida empresarial y cuando vuelve a Hungría de visita percibe que la diferencia es enorme. “Al salir de Alicante echo de menos no sólo el clima y el ambiente español, sino también la cocina mediterránea, especialmente los aperitivos típicos, las tapas”.
Hace unos años, Orsi obtuvo la ciudadanía española -trámite posible después de diez años de residencia- y hace tres finalmente puso en marcha su propio negocio: abrió una oficina inmobiliaria.
NUEVA VIDA, NUEVOS NEGOCIOS
La idea de dedicarse al negocio de bienes raíces surgió del hecho de que disfrutaba mucho el trato con clientes, fundamental en su trabajo anterior de alquiler de barcos. Asistir a las conferencias gratuitas en el centro de negocios local le ayudó a desarrollar la idea.
Orsi no estaba sola en sus ambiciones. Con la aparición de los primeros vuelos directos de bajo coste, los húngaros empezaron a viajar a la ciudad y desde hace unos diez años acuden en masa a Alicante. Y no sólo de vacaciones.
“Cada vez son más los húngaros que desean comprar un apartamento o casa en Alicante con fines de inversión o en busca de un nuevo hogar”, precisa.
Asegura que los clientes húngaros interesados en comprar inmuebles son muchos: jubilados, jóvenes y personas de mediana edad. “He vendido apartamentos a pensionistas y a parejas que van y vienen entre los dos países”.
Hogar Mediterráneo también alquila apartamentos, un sector estable, según Orsi y que requiere estar familiarizado con las normas locales, ya que está regulado de manera diferente en distintas partes de la ciudad.
“Hay lugares donde el alquiler vacacional sólo está permitido en la planta baja y el primer piso, para que los invitados no molesten a los residentes, pero también hay zonas de la ciudad donde está completamente prohibido”, explica.
Como el Estado español exige una cualificación seria para abrir un negocio inmobiliario, hay que estar muy familiarizado con la administración, el derecho y los asuntos financieros. La agencia inmobiliaria de Orsi cuenta con todos los permisos y certificaciones necesarias para operar en la Costa Blanca.
Según Orsi, iniciar otro tipo de negocio también es una buena idea en Alicante, ya que es una ciudad turística que absorbe a muchos trabajadores. “Aquí hay una cultura de gente va a cenar y se sienta a tomar un café al menos una o dos veces por semana”
Aunque implican mucho trabajo, asegura que los negocios al servicio del turismo, desde alquileres vacacionales hasta transporte, prometen éxito.
RECOMENDACIONES A LOS CLIENTES
Orsi recomienda encarecidamente a quienes estén pensando en mudarse a España aprender el idioma, porque aunque mucha gente habla inglés, el español es necesario en la administración pública y en el sector comercial. Ella habla de forma fluida húngaro, inglés y español.
«Mucha gente viene para empezar una nueva vida y se sienten atraídos por el estilo de vida español, muy diferente al húngaro”. Destaca que la voluntad de aprender un idioma indica la capacidad de una persona para integrarse en un país extranjero.
“Algunas personas salen de su país y luego se quejan de esto o aquello, que no es como en casa… Solamente quienes se adapten y acepten que ésta es una cultura diferente serán felices y lograrán sus objetivos en España”, puntualiza.
Desde Hogar Mediterráneo, Orsi está encantada de ayudar a sus compatriotas húngaros a vivir un estilo de vida donde el sol y la playa tienen un lugar especial.
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Fuente consultada: entrevista a Orsi Oletics publicada en la revista húngara Noiváltó.
