Cómo proteger tu vivienda del frío sin gastar más energía

Ha llegado el frío y lo único que queremos es mantenernos abrigados en casa. Si quieres proteger tu vivienda del frío sin gastar más energía, hay fórmulas eficientes que puedes aplicar sin depender de la tecnología. Apunta estas 4 estrategias de aislamiento térmico para mantener a raya el invierno.

Ideal para aislar la casa de las temperaturas extremas, el aislamiento térmico permite mantener temperaturas agradables en casa sin recurrir a las energías convencionales y sin hacer obras.

Estas cuatro fórmulas te ayudan a proteger tu vivienda del frío sin gastar más electricidad:

Usa la orientación en los ambientes

Significa aprovechar la luz del sol, que es la principal fuente de energía, de manera eficiente. La orientación de la vivienda permite saber cómo impactará el sol en las habitaciones. Ten en cuenta hacia qué punto cardinal mira cada una de las estancias y consigue optimizar la luz solar:

• Orientación sur: son las áreas más cálidas porque reciben más luz durante todo el día. En invierno el sol es un aliado en estas zonas. Aprovéchalas.
• Orientación norte: es la más fría porque no recibe rayos de sol directos. En invierno mantén las puertas cerradas y las persianas bajadas para mejorar el aislamiento.
• Orientación este: reciben luz hasta el mediodía, por lo que son ideales para privilegiar la ubicación de la cocina, estudio o salón. En invierno, baja las persianas por la tarde.
• Orientación oeste: reciben la luz del sol en las tardes. Privilegia estas estancias para dormir en invierno. En las mañanas baja las persianas para que no se escape el calor.

Instala cristal doble en ventanas

Aunque las ventanas favorecen la iluminación y nos proporcionan vistas, el vidrio no es un buen aislante térmico y cuanto más grande es la ventana, mayor será la pérdida de calor. Sin embargo, se pueden atenuar sus fallas.

El doble acristalamiento es un recurso efectivo para aislar térmicamente las ventanas y proteger la casa del frío. Consiste en la utilización de dos o mas vidrios paralelos separados por cámaras de aire selladas. Su acción hace que mejore mucho la aislación térmica y acústica.

Algunos sistemas de doble acristalamiento contienen un material aislante en su interior que impide que se pierda el calor hacia el exterior y contribuye a eliminar la condensación en los vidrios.

Puede ser una solución un poco costosa para proteger tu vivienda del frío, pero a largo plazo ahorras en el uso de la energía.

Si quieres gastar menos o buscas una solución para las ventanas que ya tienes, puedes colocar láminas termoaislantes sobre los vidrios. Es una película transparente que ayuda a mejorar el aislamiento térmico. Son económicas y sencillas de instalar.

Mejora el aislamiento de las paredes

Equivale a colocar un material aislante térmico en la pared para evitar la pérdida de energía.

Por un lado está la técnica del aislamiento inyectado sin obras. Está diseñada para aislar cámaras de aire en fachadas de doble hoja. Se utiliza un material de aislamiento (poliestireno, poliuretano o celulosa) y se aplica según el estado interior de la cámara, antigüedad de la vivienda y los puentes térmicos existentes. Requiere de un día de trabajo.

Por otro, están los tabiques de interior: se coloca un trasdosado sobre la pared interior existente y se tapa con pladur. Puede usarse lana mineral, fibra de vidrio u otro material aislante. Esta opción tiene la desventaja de que pierdes superficie útil de la pared, pero ofrece un buen resultado de aislamiento térmico y acústico.

Sella las puertas y ventanas

Acerca una mano a las aberturas de tus puertas y ventanas. ¿Detectas una corriente de aire frío? Por allí se escapa el calor interno que tanto te costó acumular.

Para solucionarlo coloca burletes aislantes en puertas y ventanas. Además de parar la entrada de frío evitarás que entre polvo, reducirás las pérdidas de calor y ahorrarás en calefacción. Todo, con muy poca inversión.

En resumen, aquí tienes 4 buenas formas de proteger tu vivienda del frío sin gastar más energía:

• Ubica los ambientes de mayor uso hacia orientaciones más cálidas.
• Reduce la fuga de calor con ventanas de doble acristalamiento.
• Mejora el aislamiento térmico de paredes con emplacados interiores.
• Sella las ventanas y puertas con burletes y selladores elásticos.

En Hogar Mediterráneo sabemos que durante el invierno quieres ahorrar y que la calefacción no es la única ópción disponible para aislar la vivienda del frío. Consúltanos si tienes dudas sobre el aislamiento térmico de tu piso, casa o chalet.

Fuentes consultadas:

www.arquitecturasimple.com

www.chcenergia.es